Buenos días!
Viernes por fin, y para comenzar el fin de semana con buen sabor de boca y tener algo casero, dulce y rico para el fin de semana yo te propongo estas deliciosas cookies con chocolate Jungly, si tienes peques en casa, te vas a chupar los dedos!
La parte exterior queda crujientita, y el interior blandito, son ideales para mojar en un buen vaso de leche, incluso comerlas solas, son todo un vicio. Yo he utilizado chocolate Jungly porque tenía un par de tabletas en casa hacía unos meses rodando por el armario y no sabía muy bien qué hacer con ellas, pero tú puedes utilizar cualquier otro chocolate (negro, con leche, incluso blanco). Así que me puse manos a la obra con el pequeño Neco, y dimos forma a estas galletas que están para comerte unas cuantas de una sola sentada.
Ingredientes:
- 290 gr. de harina
- 6 gr. de bicarbonato
- 8 gr. de levadura química
- una pizca de sal
- 150 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
- 125 gr. de azúcar muscovado (o moreno, en su defecto)
- 125 gr. de azúcar blanco
- 1 huevo M
- 170 gr. de chocolate en trozos, cortado a cuchillo.
- Con el accesorio de pala, batimos la mantequilla durante un par de minutos a velocidad media-alta (yo al 5 de 9), hasta que esté cremosa.
- Añadimos los azúcares y seguimos batiendo hasta que estén bien integrados.
- Seguido, agregamos el huevo y mezclamos un minuto a la misma velocidad, hasta obtener una masa homogénea.
- Añadimos la harina, el bicabonato, la levadura y la sal y mezclamos, a velocidad un poco más baja (yo he programado a velocidad 3-4 de 7)
- Cuando tengamos una masa homogénea y bien mezclada, agregamos el chocolate y mezclamos unos segundos a velocidad baja.
- Precalentamos el horno a 170º con calor arriba y abajo. Cubrimos una bandeja de horno con papel de hornear y hacemos bolas con la masa del tamaño de una pelota de ping-pong. Distribuimos bien separadas porque al cocinarse se expanden bastante. A mí me salieron 3 bandejas como la que veis en la foto.
- Horneamos 12 minutos a altura media. Sacamos con mucho cuidado, con ayuda de una pala sobre una rejilla para que se enfríen. Este paso con mucho cuidado, porque salen muy blanditas. Si te gustan muy crujientes puedes hornearlas un par de minutos más.
- Si puedes esperar hasta que se enfríen, ya están listas para consumir.
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