Últimamente dedico las mañanas de los viernes a cocinar algo nuevo, o simplemente alguna receta que me guste y me apetezca hacer, es como "mi momento" de la semana. Hoy es viernes de Carnaval y, como no podía ser de otra forma, os traigo un dulce típico de estas fechas, este año con origen italiano: unos deliciosos castagnole que han salido de freírse hace apenas 45 minutos y que están de escándalo, con una textura suave y esponjosa en su interior y con una corteza crujientita que están para comerse 4 o 5 de una sentada, os lo aseguro.
Hay varias recetas por la Red de estos típicos y antiguos dulces italianos, muchas de ellas llevan anís en su elaboración, pero yo me he decantado por no agregarle ningún tipo de licor por dos razones: en casa no somos amantes del anís y además los va a comer el peque de la casa también. La elaboración es rápida y sencilla. a mí me ha recordado un poco a la masa de rosquillas. Si queréis conocer más dulces de Carnaval, os animo a daros una vuelta por Alemania con estas Berlinesas rellenas de mermelada de fresa o un poquito más cerca por España, con unas tradicionales rosquillas de naranja.
Ingredientes (unos 20 castagnole):
- 1 huevo campero
- 30 gr. de azúcar
- 35 gr. de mantequilla derretida
- Zumo de medio limón
- Ralladura de 1/3 de limón
- 150 gr. de harina
- 8 gr. de levadura química
- Un pizca de sal
- Aceite de oliva suave para freír
Elaboración con Thermomix:
- En primer lugar, colocamos en el vaso el azúcar junto con la cáscara del limón y programamos 30 segundos a velocidad 10. Bajamos el azúcar hacia el fondo del vaso.
- Seguidamente, añadimos el huevo, la mantequilla derretida y el zumo del limón. Mezclamos 5 minutos a velocidad 4. Bajamos la mezcla hacia el fondo del vaso.
- Añadimos la harina tamizada junto con la levadura y la sal. Mezclamos 20 segundos a velocidad 6 y amasamos 45 segundos. Mientras, ponemos a calentar el aceite en un cazo alto.
- Nos enaceitamos las manos y formamos bolitas de unos 10 gr, que vamos a freír en el aceite bien caliente. Normalmente se dan la vuelta solas, en un par de minutos están listas, su tamaño aumentará y estarán doradas.
- Pasamos a un plato con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite.
- En un cuenco, mezclamos a partes iguales azúcar normal y azúcar glas, rebozamos las bolitas.
- Y ya estarían listas para ser disfrutadas.
Elaboración tradicional:
- En un bol, con una varilla manual batimos el huevo junto con la mantequilla derretida, el azúcar, la ralladura y el zumo de limón. Si tenemos una batidora de varillas el proceso será más cómodo.
- Añadimos la harina tamizada junto con la levadura y la sal. Mezclamos con la ayuda de una espétula de madera mientras podamos, después seguiremos amasando a mano hasta obtener una masa homogénea y manejable.
- Nos enaceitamos las manos y formamos bolitas de unos 10 gr, que vamos a freír en el aceite bien caliente. Normalmente se dan la vuelta solas, en un par de minutos están listas, su tamaño aumentará y estarán doradas.
- Pasamos a un plato con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite.
- En un cuenco, mezclamos a partes iguales azúcar normal y azúcar glas, rebozamos las bolitas.
- Y ya estarían listas para ser disfrutadas.
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