Rosquillas de naranja

Buenos días!

Seguimos con el recetario dulce, en este caso un dulce muy tradicional, de esos que saben hacer todas (o casi todas) las madres y las abuelas: unas deliciosas rosquillas. 

En mi caso son de naranja, porque en casa no nos gusta el anís, pero si queréis hacerlas de anís podéis añadirle unos 15 gr. de aroma de anís, o combinar ralladura de naranja y de limón. Son muy fáciles de hacer, así que es una receta indicada para todos aquellos que estáis dando vuestros primeros pasitos en el mundo culinario. El resultado es muy bueno, unas rosquillas tiernas y con un sutil aroma a naranja que hace que tengan un punto todavía mejor. 

Para hacerlas me he basado en la receta del libro de Pamela Rodíguez "Postres y otras dulcerías", recomendado 100%. Vamos con la receta:

Ingredientes (A mí me salieron 54 rosquillas):

• 2 huevos L o 3 de la talla M
• 125 gr. de azúcar
• 70 gr. de leche
• Ralladura de 2 naranjas y la corteza de otra
• 50 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
• 15 gr. de levadura química
• 500 gr. de harina
• Aceite de oliva suave para freír 
• Azúcar glass para espolvorear

Elaboración:

• En primer lugar, batimos los huevos con el azúcar.
  
• Sin dejar de batir, añadimos la leche y las ralladuras de naranja (si queréis añadir anís, este es el momento)
  
• Añadimos la mantequilla en trozos e integramos bien. 
  
• Vamos añadiendo poco a poco (yo lo hago en 3 veces) la harina tamizada junto con la levadura, y vamos integrando hasta obtener una masa homogénea, manejable y no pegajosa. 
  
• La envolvemos en film transparente y dejamos reposar en la nevera un par de horas. 
  
• Pasado ese tiempo, ponemos a calentar el aceite con la cáscara de naranja para que se aromatice. 
  
• Mientras, vamos formando las rosquillas. Para ello hacemos "churritos" de masa y los unimos por los extremos. 
  
• Freímos por ambos lados en abundante aceite. Hay que tener cuidado porque se queman fácilmente, y dejar una separación entre rosquillas porque al freírlas se hinchan. 
  
  
  
  
• Escurrimos sobre papel absorbente. 
  
• Espolvoreamos con azúcar glass una vez se hayan enfriado y...
  
• ¡Que aproveche!